Es importante mirar lo que nuestro querido Movimiento Palestra puede lograr. Desde mi lugar como docente trabajo todos los días con adolescentes y a veces esta tarea por varios motivos se convierte en rutinaria.Cumplir con plazos de las programaciones, enseñar contenidos, conceptos, sortear todas las vicisitudes que se presentan en día a día con la disciplina que cada vez está peor por la falta de respeto generalizada que vive nuestra sociedad, y además formar a esas personitas en valores.
Lo cierto es que la fuerza, creatividad y pasión que ponen los chicos de Kénosis sobrepasa esos obstáculos. Esto se vio reflejado en la visita programada como parte de invitación a su apostolado realizada en el 1º Año A de Polimodal en Ciencias Sociales del Instituto San Miguel.
No falto nada. El altar y la explicación de los signos, que los palestristas siempre presentamos, un roll play, la reflexión a través de una canción, el trabajo en grupos y por sobre todas las cosas un mensaje: se puede ser adolescente y vivir el amor de Dios.
La esperanza y la simpleza de corazón transmitida por cada uno de los chicos fue un espejo que sirvió para realizar un punto de mirada interior en el corazón de estos adolescentes. Mis alumnos estaban muy contentos y expectantes.
La misión que Kénosis tiene hoy es compleja por las hostilidades y los antivalores que nuestros adolescentes tienen incorporados a sus vidas como algo común. Sin embargo, ¡Se han largado semillas del Amor de Dios en esos corazones!
Espero que el Señor Nuestro Dios siga avivando con fuego y pasión para llevar su palabra a esos espacios, que como estos, están deseosos de conocer su inmenso Amor.
Solo me quedan palabras de agradecimiento para mis hermanos de Kénosis y espero que continúen visitando mis grupos de alumnos, pues desde mi parte, todas las veces que pueda y sea necesario contarán con mi humilde participación.
Y tengan presente siempre queridos chicos y chicas de Kénosis que: “A estos doce Jesús los envió a misionar, con las instrucciones siguientes: No vayan a tierras de paganos ni entren en pueblos de samaritanos. Diríjanse más bien a las ovejas perdidas de Israel. A lo largo del camino proclamen: ¡El reino de los cielos está ahora cerca!” (Mateo 10, 5-8).
Un abrazo de corazón
Lic. Sergio Carrizo
PM: 57
Comunidad: “Pozo de Sicar”