Desde que Jesús pasó por nuestras vidas, nuestros quehaceres, oficios, estudios, familia y nos llamó, nos hizo pescadores de hombres. Para El, ese llamado tiene un significado claro, que seamos sus discípulos, sus enviados a estar en medio de los hombres y mujeres de todos los tiempos y lugares, para acercarlos a la casa del Padre. Ser discípulos es ser constructores de una Civilización del amor, que se realiza con el tejido de una gran red, la del Evangelio, para llegar a todos.
Recordemos la escritura en Lc 5, 8-10;
“Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí, Señor, porque soy hombre pecador. Porque por la pesca que habían hecho, el temor se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él. Pero Jesús dijo a Simón: No temas; desde ahora serás pescador de hombres.”
Primero, Jesús, les enseña a modo de signo, como pescar peces… y no unos pocos o determinados peces, sino muchos, al punto de reventar las redes y necesitar más embarcaciones, como prosigue la lectura.
Y si bien, Pedro y sus amigos eran pescadores reconocidos, Jesús les enseña el modo, los tiempos de pescar, como una preparación nueva, en métodos, en ardor, significándoles que desde ese momento serán pescadores para el Reino.
Y si algo hemos aprendido en Palestra, es que no solo vino a impactar tu persona, sino que a través tuyo, el se manifiesto en otros ambientes y te envía a multiplicar la atención hacia el mensaje del evangelio.
La Captación en Palestra, hoy nos dice que debemos meternos en esos mares a los que llamamos ambientes y echar las redes con la convicción del pescador que aprendió de Jesús.
Lugar: Colegio Tulio.
Hora: 20, 30 hs.
Encargadas: Fernanda Zamora 155-538175 - Alejandra Zamora.
Lugar: Colegio Tulio.
Hora: 20, 30 hs.
Encargadas: Fernanda Zamora 155-538175 - Alejandra Zamora.