La palabra motivación deriva del latín motivus o motus, que significa ‘causa del movimiento’. Esa causa tiene que ver mucho con el comportamiento, con la conducta. (Manera de actuar, moverse o vivir de una persona en una situación determinada o en la vida diaria.)
Todos sabemos que en nuestro Secretariado son tiempos de Motivación integral, en el espíritu, en el alma, el corazón, la familia, los amigos, la comunidad. Todo se mueve al son de esa música que suena desde hace un tiempo, en esos tiempos de preparación para un acontecimiento de Gracia, por la simple presencia de un Dios generoso que llama a la Vida.
En este tiempo, nuestro comportamiento debe ser el adecuado, debe tener nuestra persona una motivación, una causa que nos ponga en movimiento interior, sobre todo en la posibilidad u oportunidad para retomar la amistad con Dios y acompañar ese movimiento hacia la Gracia de tantos hermanos.
Pongamos lo mejor de nosotros para acompañar la Motivación personal y comunitaria que tendrán los que participen de los PM 88 de varones y 87 de mujeres de la siempre movilizante Etapa de los Jóvenes.
Que nuestras palancas sean sostenidas con la oración, con las acciones propias de aquellos que sabemos lo que pasa en esos días, donde un Dios lleno de Vida se ofrece por igual a todos, y sale con brazos de abierta fraternidad a recibir a caminadores cansados que vienen de países lejanos, pero determinados a cambios que los llevarán a vivir felices.
Que sean tiempos, también, para nosotros, los ya motivados, a decir con ganas; “me levantaré e iré…” que será la mejor forma de palanquear en estos días.
Rogamos a Dios por nuestra motivación para trabajar, servir, acompañar, abrazar y comenzar a ser un cuerpo místico que camina por la vida motivando a tantos hermanos que recorren otros caminos.
Buen Motivador, queridos hermanos.