Hace 30 años, Hugo un vendedor ambulante y Fatima, hija mayor a cargo de una familia de 9 hermanos se conocieron, se enamoraron y formaron una familia.
Así, como si fuera que todo estaba planeado, en medio de la lucha diaria para buscar mas trabajo para poder tener mas comida en casa, para solventar los gastos de la casa, la ropa, pañales, se fueron presentando gente maravillosa y oportunidades únicas.
Primero un viaje inesperado, luego la aparición de una señora, después un papel con un teléfono, mas tarde un total extraño que sin conocerlos confió y brindo ayuda.
Asi, ya hace 23 años inicio el amor por una fábrica que me dio todo! Hoy, hace un mes y medio un incendio la destruyó totalmente, se fue años de trabajo, de lucha, de sacrificio, de mucho sacrificio, todo se había ido allí.
Pero en realidad no fue tan así, solo se había ido lo viejo para que nazca lo nuevo... porque no fue raro que después del siniestro y en medio de los escombros solo se halla salvado Él, una imagen de mi hermoso Sagrado Corazón de Jesús.
Porque nos habíamos olvidado de la familia, de hasta saludarnos, de reírnos juntos, de compartir, de escucharnos y entendernos, de RESPETARNOS!
Porque tampoco fue raro que me haya tocado vivir esto a un mes de mi PM y que después de unos días se me cruce una comunidad que me enamoro! "Timoteo", la del Barrio San Martín.
No tan solo por sus integrantes, amo hasta cada letra que conforman su nombre... nada fue raro. Estas personas me ayudan todos los días a pedalear!
A que esta carga sea mas liviana, a volver siempre. Dios no tan solo me enseño a valorar mi propia familia, me bendijo con otra.
Daniela Díaz PM 87 - Comunidad Timoteo - Etapa Jóvenes.