COMUNIDAD TIMOTEO - Etapa Jóvenes - Testimonio - "Hay que agradecer poder hacer su voluntad y ponernos manos a la obra."

El Señor te va mostrando caminos que a veces o la mayoría de las veces resultan difíciles de caminarlos, caminos en los que uno llega a dudar y a preguntarse ¿Por qué a mi?, pero lo que uno tiene que preguntarse, en realidad, es ¿POR QUÉ NO A MI? 
Y precisamente vine atravesando dificultades que me llevaron a tomar decisiones que nunca me las hubiese imaginado, decisiones que me costaron un determinado sacrificio y que me causaron dolor en el alma, pero... Tuve ahí a mi Comunidad, a mi amado Timoteo, a ese Hijo muy Amado, que me decía: "ANÍMATE, ERES LA HIJA MUY AMADA DEL SEÑOR. SONRÍE, ESTO ES POR ALGO, Y ESE ALGO SE TE IRÁ PRESENTANDO AL PASAR LOS DÍAS..." 
Y a pesar de que yo sentía que no todo estaba resultándome, a pesar de que no quería escuchar, con el tiempo y muy a paso de tortuga, fui dejando que sea Él quien habite de nuevo en mi, y es tan maravilloso que Dios esté dentro de uno, que el amor es infinito y se empiezan a ordenar las piezas. Porque Él nos pide que confiemos en Su voluntad, que entreguemos nuestros pensamientos y obras en sus manos, que nos hagamos fuertes en la Oración, en la Confesión y en la Eucaristía; nos pide amar a la Familia y al Prójimo; nos pide depositar total confianza sobre Él. 
Y que importante es saber rezar, reconciliarse y recibirlo cada Domingo en la Santa Misa, porque son nuestro principal sostén para llevar el amor infinito a nuestra Familia y al Prójimo (primeramente). 
Hay que agradecer poder hacer Su Voluntad y ponernos manos a la obra. Y agradezco enormemente poder tener la bendición de tener un Padre como lo es Dios, porque es quien nos brinda las herramientas para sacarnos brillo a nosotros mismos, que somos su lujo, para ser mejores en lo que somos como persona y ser amantes de la Vida, la Verdad y la Vida. 

¡Gracias Dios por mi vida y mi familia! ¡Gracias Dios por mi compañero, mi gran amor! ¡Por mis amigos! ¡Por mi Movimiento!

Porque creo que sos vos, nuestra fuente escondida, Y alcanzarte es alcanzar como el centro de la vida. Toco el borde de tu alma y es un nuevo nacimiento.
¡Y se está curando el centro de mi centro! ¡Necesito de tu amor… Necesito de tu amor!! 

Sofía Macías - Pm 82 - Coordinadora Comunidad Timoteo - Etapa Jóvenes.