Parece ayer cuando comenzábamos este año con miles de ideas nuevas, expectativas, compromisos asumidos y sueños que parecían lejanos. El tiempo pasó y, al ver los meses que pasaron, cómo todo tomó forma, pienso que, sin duda, fuimos bendecidos por el Señor de nuestra historia. No tengo otra cosa mas que dar gracias a Dios por cada una de sus bendiciones, por los sueños y metas cumplidas, por el Amor hecho abrazo, compañía y acción en nuestras comunidades y, por la gracia que recorrió como río cada parte de nuestro ser durante este año.
Es normal hacer balances, son necesarios para nuestro crecimiento comunitario y personal. Hoy me quedo con todo lo construido hasta ahora, con esas cosas por mejorar y con el compromiso fiel y asumido de que el anuncio de la Buena Nueva, el Amor y la Misericordia serán nuevamente nuestros pilares fundamentales para emprender nuevos caminos.
Diciembre llega y hay muchos sentimientos encontrados pero lo terminemos sabiéndonos amados profundamente por Dios, sintiéndonos elegidos para estar hoy aquí. No dejemos de dar gracias por todo lo vivido como Movimiento y los invito a que celebremos juntos a ese Cristo que nos reúne, nos une y nos convoca en su mismo Espíritu.
"Aquí en mi Belén, te doy posada mi Jesús, es humilde pero lleno de amor. Renace salvador, que aquí te espero yo".
Verónica Giselle Rodriguez - PM 78 (Etapa Jóvenes).
Coordinadora Movimiento Católico Palestra Tucumán